martes, 6 de diciembre de 2011

Rutinas

Ella se revuelve en la cama, su cuerpo se tensiona, se eriza, le llama, le reclama
él despierta en su mañana, los ruidos, las primeras luces, se sacude, se levanta.
Ella se acaricia la espalda, se muerde las ganas, susurra su nombre sin calma;
él desayuna, se masturba, se ducha, se afeita, se larga.
Ella se moja, se acaricia, la ausencia la desgarra
él vende, factura, promueve, la extraña
Ella encendida se toca, se penetra, se sangra;
él se aburre, la piensa, la odia, le llama.
Ella bosteza, se rinde, descansa; 
él deambula, da vueltas, inventa y se cansa.
Ella se entrega, se pierde, a la noche se consagra; 
él espera, posterga y las horas alarga.
Ellos se viven, se sienten, se extrañan.

1 comentario:

Carloenrique dijo...

Real, simple y conciso.

Más vale ir cansado al trabajo.

Gran denuncia.