martes, 22 de noviembre de 2011

Mala conversación

- Has vuelto a fumar - Dice el chico que la ha seguido hasta la banqueta del patio donde la algarabía de la fiesta no les llega.
- Nunca lo dejé - responde la nena con tono seco y desganado.
- ¿nunca?
- Nunca. Cuando estábamos juntos no fumaba antes de verte y si ibas a casa, lo hacía mucho antes de que llegaras; no sabes lo que hubiese dado por un cigarro después de nuestros episodios de cama.
- Hipócrita
- Pendejo
- ¿Y el flaco que has traído esta noche quién es? ¿Acaso tienes un novio?
- Parece que me he comprado un novio en rebajas, pero ¿A vos qué?
- A mi nada, no creas que me importa mucho. Sólo que parece joven e inteligente, no va mucho con tus gustos
- He cambiado de gustos. Después de probar con los de tu estilo pocas ganas me han quedado para rarezas.
- ¿Y este va en serio? He escuchado que ahora eres un poco ligera.
- ¿ligera? ¿Es un sinónimo de ser puta, putisima?
- No finjas que te has ofendido, los dos sabemos que te gusta lo que eres.
- Si, es verdad. Me gusto como soy. Qué mierda vas a saber vos de lo que soy. Demasiado concentrado en sí mismo como para saber de los demás.
- Que amarga estás mujer, que triste, que resignada.
- Parece que todavía te ves reflejado en mi - ambos hicieron una mueca de cansancio. La chica tiró al colilla del cigarrillo gastado y le miró con una fijeza vacía.
- ¿También actúas ahora? ¿ También le mientes a él?
- No. La mentira sólo era un recurso cuando estaba con vos.

No hay comentarios: